miércoles, 26 de febrero de 2020

Consuegra, Toledo, Castilla la Mancha, España.

¡Hola!

Aquí estoy de vuelta con una nueva entrada. Esta vez sí que me he hecho de rogar, y es que estaba preparando el examen de un título que me había caducado durante nuestros años de aventura por el mundo, y he estado absorbida. Aunque pensándolo bien... es una mala excusa, porque algo que he aprendido viviendo fuera es que, si se quiere: "Las noches se vuelven días y los minutos se vuelven horas. Frase que leí estando en México, y me chifló.

Hoy os cuento una excursión preciosa y muy completa al ladito de Madrid.

Es el pueblo de Consuegra, en la provincia de Toledo, y en la comunidad autónoma de Castilla la Mancha. Donde puedes visitar el castillo de la Muela, una fortaleza medieval del siglo X, que se situa en la cima del cerro Calderico y está rodeada de antiguos molinos de viento; recorrer un pueblo con encanto con vistas espectaculares de los campos de Castilla; y comer de lujo.

¡No os lo perdáis!

Castillo y molinos de Consuegra. Cerro Calderico, Toledo.



Como siempre os cuento lo primero distancias y recorrido. Consuegra está a unos 150 kms de Madrid, y, se tarda en coche en torno a una hora y cuarenta minutos por la A4. 

Nosotros fuimos en noviembre y salimos un viernes que era puente en Madrid tipo 10:15 am, y a las 12h. estábamos ya en la oficina de información que tienen en uno de los molinos de viento (en las faldas del cerro Calderico) consultando las alternativas de visitas y sacando las entradas.
 La visita guiada tiene una duración de aproximadamente una hora y media, y la siguiente disponible era a la 1 pm, así que decidimos que era mejor pasear por el pueblo y comer tempranito (previendo que siendo fiesta iban a estar todos los sitios a tope, y acertamos de lleno). Así que dejamos la visita guidada para las 4:30 pm. Para ver primero el castillo de la Muela y luego uno de los molinos de viento, el Rucio.

 La chica de información fue atenta y nos contó todas la opciones pero, ¡ojo!, no nos avisó de una cosa que supuso quedarnos sin ver el mecanismo en funcionamiento del único molino que aún está en activo, el del molino Rucio. Y es que, aunque te den la entrada en la oficina de información tienes que pasar antes por el molino en cuestión para que te apunten, ya que si llenan el cupo no puedes acceder. Y, como fuimos directamente después de la visita al castillo, tipo 5:45 pm, pues ya tenían el cupo lleno y la de las 6 pm era la última visita. Así que no pudimos acceder. Tenedlo en cuenta si os apetece verlo.

La visita guiada del molino sí la puedes hacer, pero te llevan a otro, que se llama Bolero, pero cuyo mecanismo no está en funcionamiento.

Molinos de viento en Consuegra, Toledo.

El coste de la entrada es de 8 euros para los adultos (a partir de 13 años) y de 4€ para los  niños entre 4 y 12 años. Los menores de 4 años entran gratis. 
Los horarios son :
De lunes a viernes de 10 a 14h, y de 15:30 a 18h.
Los sábados, domingos y festivos es ininterrumpido de 10 a 18h.
Y durante los fines de semana algunas de las visitas guiadas son teatralizadas.

La entrada incluye 4 actividades: las visitas guiadas al castillo de la Muela, al molino Bolero y al museo municipal de Consuegra , y el guía es un informador turístico municipal. También incluye la visita libre al molino Rucio (este es el molino cuyo mecanismo sigue en funcionamiento y puedes verlo en acción durante la época de molienda).

Molinos de viento en la cima del cerro Calderico. Al fondo el castillo de Consuegra, Toledo.


Os sigo contando nuestro plan que fue entonces irnos primero al pueblo, dar una vuelta para descubrirlo a nuestro aire,  los portones  y las fachadas de las casonas manchegas, los balcones de edificios históricos, la plaza del ayuntamiento, la iglesia de Santa María la Mayor. Llevábamos un plano que nos habían dado en la oficina de información turística e íbamos intentando llegar a los sitios marcados como de "interés". Nos perdimos varias veces, pero ahí está también la gracia.

De vez en cuando llegabas a un callejón con vistas al castillo o a los molinos (recordad que están en el cima del cerro Calderico) y, da igual desde donde los veas, siempre te quitan el aliento por lo icónico, y quijotesco. Es una postal preciosa. Ese día, además, era de mucho viento, y había muchas nubes, lo que hacía un cielo cambiante muy bonito.

Molinos de viento. Cerro Calderico, Consuegra, Toledo.

Castillo de Consuegra. Cerro Calderico en Consuegra, Toledo.

Iglesia de Santa María la Mayor. Consuegra, Toledo. 


De allí nos fuimos directos a comer. Llegábamos temprano, antes de las 2 pm, pero no fue algo inmediato, porque preguntamos en un par de sitios hasta finalmente encontrar hueco en el restaurante La Bodeguita, donde los comedores parece cuevas, como si estuvieran excavados en la roca, y decorado a la manera castellana, rústico y austero pero con mucho encanto. Comimos compartiendo: sopa castellana, croquetas de distintas variedades de caza (jabalí, ciervo, venado...) , pisto manchego con huevo, y mis hijos mayores probaron carne de ciervo.  Contundente pero riquísimo. Y nos atendiero fenomenal. Todos descubrimos nuevos sabores ese día.


A las 3:30 pm  ya volvíamos al cerro Calderico. Lo que hicimos fue dejar el coche en el aparcamiento de abajo, a los pies del cerro. De hecho veréis señales que parece prohiben el acceso de los coches, pero solamente van dirigidas a los autobuses y autocaravanas. Así que, si quieres, puedes subir con el coche hasta la puerta del castillo  y los molinos, ya que se puede aparcar a un lado de la carrereta. Nosotros subimos caminando y es un paseo precioso, y, aunque algo empinado, no es nada difícil. Como siempre mis hijos pusieron el turbo, y casi subieron haciendo carreras. Pero es un ascenso para hacer tranquilamente y pararse a cada rato, por las vistas del castillo y los molinos según te vas acercando, y de los campos de Toledo, que en noviembre estaban preciosos con distintas tonalidades de amarillos, verdes y rojizos.

Subiendo el cerro Calderico, Consuegra, Toledo.

Subiendo el cerro Calderico, Consuegra, Toledo.

Molinos de viento en Consuegra, Toledo.

Campos de Castilla. Desde el cerro Calderico, en Consuegra, Toledo.

Molinos de viento en Consuegra, Toledo.
Molinos de viento en Consuegra, Toledo.












En ese momento descubrimos que uno de los molinos tiene un restaurante. De hecho lo llaman el "gastromolino", y mi marido decidió tomarse un café, y todo tenía un pintón. Aparte de que el lugar era súper acogerdor. Os puedo confirmar que el café era riquísimo. Así que esa podría ser otra opción para comer algo si llegáis justos  y os apetece quedaros por el cerro.

La visita al castillo empezó con algo de retraso ya que esperaban a que llegaran todos los inscritos. 
El guía que nos tocó fue encantador, contaba multitud de anécdotas de la vida de la época medieval, y hacía participar a los niños del grupo con preguntas, y hasta adivinanzas, sobre la  utilidad de algunos instrumentos o herramientas que encuentras en las distintas estancias del castillo, o sobre el tipo de vida que hacían en esa época. Así que lo hacía muy participativo y entretenido.

El castillo, de 1.000 años de antiguedad, fue construido a mediados del siglo X por Almanzor , durante el califato de Córdoba, y se levantó en el lugar donde hubo una fortaleza romana. Tiene una historia interesantísima, ya que durante la invasión árabe, y la posterior Reconquista, pasó de manos cristianas a musulmanas en varias ocasiones. El hijo del Cid , Diego, murió allí en la batalla de Consuegra, luchando contra las tropas almorávides que avanzaban sobre Toledo el 15 de agosto del año 1.097. Según nos contaron, las tropas del rey de León y Castilla, Alfonso VI, se tuvieron que proteger dentro del mismo castillo y estuvieron durante ocho días repeliendo el asedio de las tropas moras enemigas protegidos por las murallas y defensas del castillo. Los almohades finalmente terminaron  retirándose. 

Durante el siglo XVI el castillo fue la sede del priorato de la orden de San Juan.

Hay dos aljibes, uno es original, y el otro está remodelado, que eran recintos donde recogían y almacenaban el agua de lluvia, y es muy interesante la forma en que recubrían las paredes para que no se pudriera. 

La capilla, que está en último piso, tiene una ubicación privilegiada, y es de un misticismo especial. Y desde las murallas, y almenas del castillo las vistas del pueblo de Consuegra y de los molinos es privilegiada.

Después de la visita, y de todo lo que conoces sobre cómo vivían, te  das cuenta de la dureza de la vida y el trabajo en esa época, y de lo "flojos" que somos ahora.

Os dejo muchas fotos hechas durante la visita guiada, para que os hagáis una idea.

Castillo de Consuegra, Toledo.

Visita guiada en castillo de Consuegra, Toledo.

Vistas del molino y el pueblo desde el interior del castillo de Consuegra, Toledo.

Molino de viento en Consuegra, Toledo.
Castillo de Consuegra, Toledo



Vistas de los molinos de viento desde las murallas del castillo de Consuegra, Toledo.

Castillo de Consuegra. Toledo.



La duración de la visita fue de algo más de una hora el castillo, y en torno a media hora el molino Bolero. Nosotros no fuimos al final al museo municipal de Consuegra porque teníamos que volver a Madrid, y andábamos ya todos agotados de tanto paseo, especialmente el pequeño. Una excusa para volver, porque también nos contaron que a las afueras del pueblo tienes los restos de un acueducto romano que abastecía de agua a todo el pueblo. 

Además recordad que habíamos dejado el coche en el aparcamiento de las faldas del cerro, así que tocaba bajar caminando. Finalmente salíamos de allí tipo 7 pm,  y estábamos de vuelta en Madrid pasadas las 8:45 pm. 

Naturaleza, historia, cultura, arquitectura y  gastronomía... en lo que sería un "Pueblo Mágico" en España.

¡Sin duda un día redondo!


Molinos de viento vistos desde el castillo de Consuegra.



Espero que os haya gustado la excursión  y os sirvan las recomendaciones.

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Gracias por leerme y...
¡¡Hasta pronto!!

2 comentarios:

  1. Precioso sitio, tan cerca y no he estado, no tengo perdón. Muy chulas las fotos, saludos viajeros.

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    1. Hola Raúl , muchas gracias por comentar. Y sí, es un pueblo precioso y con mucha historia. Las fotos es que casi se "hacen solas". Saludos viajeros!!

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